En ese nivel profundo que sonríe por no ser tocado,
el niño mirando desde la colina que conversa con
el aire que le acaricia la cara.
Ese nivel profundo donde las burbujas ya
no quieren emerger,
donde la palabra no tiene sentido,
donde el tiempo es un pañuelo tirado.
Ese nivel profundo del aire sin amarras,
del huérfano perdido que no se encuentra en ningún espejo reflejado.
Ese nivel profundo donde sopla sobre sí mismo hacia alguna parte,
donde cae una esperanza desmayada,
donde un libro regalado perdió sus hojas como una cáscara sin fruto.
Así voy,
como una crisálida que perdió la mariposa,
aquella que salió en busca de una flor inventada dentro de su mente,
aquella que deja un olor de todas partes,
un sonido que depende de los ecos,
que depende de los golpes en paredes,
de pisadas que se acercan,
de una voz a la distancia,
de un momento en la noche que me lleve al placer de ese nivel profundo del que hablo,
un placer que no sé por qué me ataca y me vence y me rindo.
Todo es invisible,
nada se puede mirar,
ni lo que es,
ni lo que fue,
solo soñar como una imaginación que se encarna de día y te mira.
Así voy yo,
imaginando una mariposa,
a su vuelo,
a sus alas que cortan el aire que se vuelve a sanar cuando se aleja...
..:: MAuro ::..
12/08/2015
8:24pm