me entregó libros sin parientes que
los sepan llorar,
Porque yo en el afán de conversar con
los muertos descubrí siempre un
testamento que me dejaba algo a mí,
si no era un abrigo contra el llanto
era una receta para trocear esperanzas
remedios para convertirse en dios o
moldes de las telas embrujadas,
Le pedí sabiduría a la nada para
ver aquel brillo en el hombro cortado
para hacer de caramelo las jaulas
para saber decir los pedazos de mi vida a cada quien
pedazos que parecen completos si solo un ojo lo ve
Le pedí sabiduría a la nada para
ensayar esculturas como disculpas
para crear vírgenes que rezo que no conocen mis pecados
para jugar con el barro e inventarme amores que
pasan con el tiempo,
Le pedí sabiduría a la nada y me entregó solo un cuervo
un ave que roba pasiones que no necesita
solo para poder sentirlas y no miedo
..:: MAuro ::..
9:52
1/04/2012
1 comentario:
sugestivo *****
Publicar un comentario